Agro
En las dos frutas exóticas más exportadas del país se encontraron al menos cuatro virus que desencadenan bajas en la producción y la rentabilidad. Entre los síntomas –que suelen confundirse con deficiencias nutricionales– están decoloración, malformaciones y amarillamiento. Es crucial estudiar y certificar las semillas.
Los Planes Integrados de Manejo de Plagas suelen estar
enfocados en malezas y enfermedades causadas por bacterias y hongos. Sin
embargo, aquellas afecciones relacionadas con virus siguen siendo desconocidas
para los agricultores, “tanto es así que asocian los síntomas con deficiencias
o exceso de nutrientes, trastornos fisiológicos o daños provocados por otros
microorganismos dañinos”, afirma Michelle Bacca David, magíster en Ciencias -
Biotecnología de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL) Sede Medellín.
La investigadora analizó los virus
que estarían afectando la uchuva y la gulupa del suroeste de Antioquia, ambos
cultivos de gran importancia económica para el país. El primero, según cifras
de la Asociación Nacional de Comercio Exterior, registró en 2022 un peso en
ventas externas de 8.541 toneladas netas, y en 2021 el segundo registró 9.813
toneladas netas, lo que representa crecimientos exponenciales récord con
respecto a años anteriores.
“El primer paso para
contrarrestarlos es hacer investigación y caracterización de los virus que
tienen los cultivos, y con esto claro podemos pensar a futuro en tratamientos y
métodos preventivos, teniendo en cuenta además si hay o no vectores (insectos y
otras plantas) implicados en la transmisión”, explica.
Para los estudios se analizaron
semillas y plantas –con y sin síntomas– tomadas de cultivos que tenían de uno a
dos años de edad. “El material lo procesamos en el laboratorio, mediante
pruebas moleculares como la transcripción inversa seguida de reacción en cadena
de la polimerasa convencional (RT-PCR) en tiempo real (RT-qPCR), y
secuenciación de alto rendimiento (HTS), que nos permiten incluso ensamblar
genomas virales nuevos”.
Se encontró que el virus PMTV
–también conocido como mop-top–
es el de mayor prevalencia en los cultivos de uchuva, ya que se detectó en el
100 % de las muestras sintomáticas (deformaciones, moteados, mosaicos
rugosos, clorosis intervenal) y en el 80 % de las asintomáticas.
Los análisis HTS revelaron una nueva
especie de virus, muy relacionada con el género Trichovirus, denominada tentativamente como Cape gooseberry associated trichovirus (CgaTV).
“Este hallazgo es muy importante, pero preliminar. Anotamos la secuencia de su genoma
y la subimos a las bases de datos. No obstante, aún queda por investigar cuáles
son los síntomas que induce y toda su biología”, advierte la investigadora.